miércoles, 24 de julio de 2013

Zeil Capítulo 2







           Estoy sudando de lo mal que lo pasé esta noche. Este sueño me está estremeciendo, no entiendo por que, pues me han pasado cosas peores a lo largo de mi vida. ¿Quién era la persona a la que perseguía? Esa pregunta me está inquietando… Estoy empezando a ponerme nervioso… Me sobresalto cuando llaman a la puerta


            -¿Qui…quien es?-pregunto asustado.

La persona no responde, así que decido acercarme a la puerta. Vuelvo a preguntar, pero de nuevo, no recibo respuesta. Pongo una silla en el pomo y cojo mi espada. Enseguida me doy cuenta de que intentan forzar la cerradura para abrirla. Lo consiguen, pero la silla dificulta el paso. No consigo ver quien es, pues una capucha negra le tapa la cara, pero mis instintos me dicen que ataque. No pienso en lo que estoy a punto de hacer, me coloco detrás de la persona que acaba de entrar sin darle tiempo a reaccionar y le pongo la espada al cuello. Justo antes de degollarle vuelvo a preguntar en susurros…

-¿Quién eres? ¿Por qué te tapas la cara?

-         No has debido de hacer eso, Zeil- contesta

-¿Cómo sabes mi nombre? ¿Quién eres?


No me da tiempo a acabar de hablar, pues el desconocido me agarra por el cuello y me tira al suelo y quedo inconsciente.

            Me despierto. Tengo frío, y estoy empapado. El lugar en el que estoy es oscuro, no oigo nada, excepto el sonido del agua en cascada a lo lejos. En mi vida nunca he tenido tanto miedo como ahora. Oigo unos pasos que se acercan hacia mi. De repente oigo una delicada y dulce voz femenina que me habla. Me esfuerzo por comprender lo que dice, aún estoy demasiado aturdido. Me vuelvo para saber de donde proceden esos pasos. Poco a poco distingo entre sombras la figura del ser misterioso que me atacó, pero no puedo verle el rostro. Suavemente me desata, y puedo sentir su aterciopelada piel rozando la mía. Por fin empiezo a entender algunas de las palabras que me dice. Pero no tienen sentido. Es como si estuviera hablando mi idioma por primera vez. Tengo una especie de deja vu…

            -Veo que no eres una leyenda-dice la voz

            -Se que has oído hablar de lo bueno que soy en las batallas, pero que seas una gran fan no es razón para que me secuestres.

           
            -Veo que eres muy ingenuo. ¿Sabes algo de tu historia fa…

            -¿Cómo que muy ingenuo? ¡Soy el heredero a la corona de…de todo!

            -No me refería a eso. Me refería a tu historia familiar….tus ancestros, las batallas que ellos libraron y, sobretodo, tu herencia.

            -Mi familia está muerta. Solo me queda mi tio. Además, ellos nunca tuvieron riquezas. Murieron en una guerra. Gracias a mi tio, ahora soy el heredero de todo…

            -¡Quiero decir que tu familia….

            -¡Mi familia nada! Están todos muertos excepto mi tio y mis pri… oh no, me acabo de acordar de que….

            -¿¡Quieres callarte y escuchar de una vez!? ¡Tu familia no te dejo una herencia material, sino una herencia moral!

            -¿Tu estas loca o que? Ni siquiera me has enseñado tu cara, ¿y me vas a decir que mi familia ya muerta y pobre en sus dias me ha dejado una herencia?
El único recuerdo que guardo de ellos es este collar, echo con una piedra inerte…

            -El collar…

            Viene una persona por detrás y la agarra por la muñeca. Ella deja escapar un pequeño chillido del susto y la tapan la boca. Empiezan a llegar mas y de repente una voz ronca me grita:

            -¿Qué sabes?

            No me da tiempo a responder, pues otra persona me agarra con brusquedad y me amarran las manos, me tapan los ojos y la boca y me suben a una especie de tabla de madera.

            Llego a una sala. Me posan en el suelo y me dejan allí, solo, o por lo menos eso pienso … cuando consigo desatarme y quitarme las vendas de los ojos, veo luz, ¡por fin! Cientos de ojos me estan mirando, y yo no resisto la tentacion de preguntar


                        -¿Qué hago aquí?

No me responden, pero siguen mirandome, no podria asegurarlo, pero me parece que hasta con admiración.

-¡Exijo una respuesta!-grito.

Todos se quitan la capucha a la vez, excepto uno, el mas cercano a mi. Creo que es la mujer que me secuestro al amanecer.

-No puedo comprender porque no nos recuerdas-dijo

-No puedo recordar a personas que no conozco-contesto

-Por favor, mirale la cara

Llamo a un hombre alto y fuerte cuya cara me suena muchisimo.

-¿Te acuerdas ahora?


-No se quien es este tio.-contesto, ¿Quién es ese?-solo se que quiero irme de aquí ya.

Zeil Capítulo 1

                                                      


            Por fin retorno a mi hogar, al castillo en el que vivo. Han sido tres duros e interminables meses de sangre, gritos estremecedores, y cadáveres inertes. Al fin conseguimos vencer la batalla. Aunque me temo que la guerra acecha con gran fuerza.

            Las tribus enemigas son poderosas; pero por suerte mi tío, que es el rey, me tiene dirigiendo todo el cotarro. ¡Estarian perdidos sin mi!

            Entro en la sala del trono, donde se encuentra mi tio Saummus, èl gobierna todo, y como no tiene descendencia masculina, soy su sucesor a la corona. Es una locura, porque aunque somos primos, pretende que me case con una de sus dos hijas, Enya, que es dos años mayor que yo, o con Viana, que para mí es muy niña, puesto que ni cumplio los dieciséis, y yo tengo ya casi veinte.

            Me acerco a mi tio, y me arrodillo ante el, no me gusta hacerlo, pero si no, es una falta de respeto.


            -Mi  rey- Anuncio con respeto- La batalla a sido un éxito, la baja solo fue de sesenta soldados, y dos comandantes.

            -Enhorabuena Zeil- Me contesta- ¡Si que sabes manejar un ejercito! Te subestimé.

            -Muchas gracias- Contesto con ironia ¿Esque no se fiaba de mi?- Es todo un halago- Si claro lo que tu digas, pero yo aquí se manejarme bien.


            Se levanta del trono y se acerca a mi.


            -Cambiando de tema…- Comienza- ¿Escogiste ya a una de mis apreciadas hija?

            -Eh…Bueno…- Me levanto y me siento en su trono, tengo que acomodarme a mi futuro.- Lo he pensado mucho… y ya tengo una elección. No me quedo con ninguna…

            -¿¡Pero que dices!?- me interrupe

            Eso es una falta de respeto para el futuro rey, a mi.


-         A lo que iba- continuo- Enya es muy marimacho, y Viana es solo una niña.

-         ¡No son excusas! Tienes tres dias para decidirte, si no elegiré yo por ti.


            -Saummus, por favor, acabo de llegar de tres meses de batalla, ¡no me agobies con temas que no me interesan! Tres dias…¡por favor!

            -Pues una semana y ningun dia más.

            Salgo de la sala, odio que mi tio me agobie con esos temas inútiles, soy el futuro rey, si me da la gana me caso con quien yo quiera aunque sea con la hija del rey del otro bando. Pero a mi nadie me dice lo que tengo que hacer.


            Me dirijo a mi cuarto, y lo primero que hago es cerrar la puerta con llave, despojarme de mis armas, tirarme en la cama y jugar un rato a la primera consola que pillo, pero por desgracia, es obsoleta. Esta Ps3 ya tendra mas de 150 años, ya que estamos en el año 2163. Pero como me da pereza cambiarla, me hecho a dormir.
           


            Un sueño me aborda, es una sangrienta batalla, estoy corriendo detras de algo, o alguien… no estoy seguro… solo se que es muy importante para mi.